«La curiosidad es ese caballo alado de la atención. Ese chispazo emocional «sagrado». Esa luz que ilumina el conocimiento nuevo. Y como la alegría, un «don» impreso, en nuestro cerebro inquieto. Viva la curiosidad, nos traerá el cambio profundo que necesitamos.»
Francisco Mora
Despertemos la curiosidad en cada niño y niña, en nosotros mismos…Sintamos la inquietud de saber, de encender esa luz, que desde la emoción por descubrir, nos lleve de su mano, a nuevos retos y sueños que aún están por hacer…
La sobreestimulación que reciben nuestras niñas y niños en su cerebro, afecta a su desarrollo global e integral, debido a la exposición a las tecnologías…y ya no solo me refiero a pantallas y videojuegos…Películas, series, …. Un montón de información, que les retiene en espacios cerrados, durante tiempo, y que no permiten ese contacto con ese otro ambiente natural, mucho más favorable para ellos y para nosotros. La naturaleza y todos los elementos que en ella están, proporcionan a los niños, los estímulos que necesitan para su desarrollo. Estímulos naturales, que les ayuda a desarrollar, la curiosidad, el movimiento libre, la atención, el descubrimiento, la sensación de libertad, y por tanto de autonomía. La capacidad creativa y la imaginación se ponen al servicio de divertirse, y crear. ¿Quién no ha visto a una niña o niño, jugar con unas piedras y unos palos, por ejemplo a hacer comidas? El contacto con la naturaleza evita y ayuda. Da y nada quita. Seamos más conscientes de que menos espacios cerrados, y más aire fresco, favorecen el desarrollo integral, de nuestros niños y niñas. GRACIAS. LacasadeB
